Crónica Murcia.

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Disminuyen un 28% las ejecuciones hipotecarias en Murcia durante el tercer trimestre.

Disminuyen un 28% las ejecuciones hipotecarias en Murcia durante el tercer trimestre.

La reciente publicación del Instituto Nacional de Estadística (INE) revela que en la Región de Murcia se han iniciado 154 ejecuciones hipotecarias durante el tercer trimestre de este año, es decir, entre julio y septiembre. Esta cifra representa una notable disminución del 28% en comparación con el trimestre anterior, lo que podría ser motivo de alivio en una comunidad que ha enfrentado retos económicos en los últimos años.

Si analizamos los números en relación al mismo periodo del año 2023, observamos que aunque la cifra se ha mantenido en 154 ejecuciones, hay una ligerísima disminución del 4,94%, lo que indica una tendencia a la estabilización en el contexto hipotecario de la región.

Desglosando los niveles de ejecución, del total de hipotecas, 19 corresponden a fincas rústicas mientras que la mayoría, un total de 112, afecta a viviendas en áreas urbanas. Además, registramos una ejecución en solares y otras 22 en propiedades urbanas distintas. Este panorama, aunque diverso, muestra un predominio claro de ejecuciones en el sector urbano.

El número de ejecuciones sobre viviendas en fincas urbanas ha mostrado una disminución del 18,8% respecto al trimestre anterior, mientras que, en términos interanuales, ha aumentado un 1,82%. Esto pone de manifiesto una posible mejora en el mercado inmobiliario, aunque la situación sigue siendo delicada para muchas familias que enfrentan la amenaza de desahucios.

A nivel nacional, el conjunto de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales se ha situado en 1.718 en el mismo periodo, lo que evidencia una disminución del 1,1% en relación al año anterior y constituye el registro más bajo para un tercer trimestre desde 2019. Esto sugiere que las medidas adoptadas para frenar los desahucios están surtiendo efecto, aunque aún queda camino por recorrer.

Durante los últimos diez trimestres, las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales han tenido un descenso interanual continuo, lo que podría interpretarse como una señal alentadora para el sector inmobiliario de España, a pesar de los desafíos persistentes.

Si comparamos estos datos con el segundo trimestre de este año, se ha observado una caída del 23,8% en las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas, lo que refuerza la tendencia a la baja en el último año.

La principal finalidad de la estadística del INE se centra en ofrecer un informe trimestral sobre el número de certificaciones de ejecuciones hipotecarias iniciadas e inscritas en los Registros de la Propiedad. Es vital recordar que no todas estas ejecuciones culminan en un desahucio efectivo de los propietarios.

Entre julio y septiembre, se han iniciado un total de 4.121 ejecuciones hipotecarias, lo que significa un incremento del 22,8% en comparación con el mismo periodo del año pasado, aunque hay que señalar que esta cifra es un 25,5% inferior a la del trimestre anterior, lo que puede ser visto como un signo de recuperación a medida que se avanza hacia un entorno más estable.

Si nos enfocamos en las fincas urbanas, 3.874 ejecuciones han sido registradas, lo que representa un aumento del 22% en términos interanuales, pero un descenso del 25,2% en comparación con el trimestre anterior. Este equilibrio tenso entre el crecimiento y la caída sugiere un mercado inmobiliario en adaptación.

En particular, las ejecuciones sobre viviendas han alcanzado un total de 2.575, un 10,2% más que en el tercer trimestre de 2023, aunque también se ha registrado una disminución del 20,2% en la comparación trimestral. Esto implica que mientras el total de ejecuciones presenta un crecimiento en términos anuales, la media del trimestre ha tenido un impacto negativo, lo que puede causar preocupación en el ámbito social.

Por otro lado, las ejecuciones que involucran a entidades jurídicas han observado un incremento impresionante del 119,5% interanual, aunque han visto un leve descenso de 0,4% en comparación con el trimestre pasado, elevándose hasta 496 casos. Asimismo, las ejecuciones sobre solares han aumentado un 23,5% en tasa interanual.

En el ámbito de locales y otros espacios comerciales, las ejecuciones han llegado a un total de 1.199, lo que es un 58,2% más que en el mismo trimestre de 2023, sin embargo, esto también representa un descenso del 35,2% con respecto al trimestre anterior.

Refiriéndonos a las fincas rústicas, el aumento ha sido del 37,2% interanual, aunque han descendido un 30,8% en relación al periodo anterior, lo cual puede indicar una fluctuación considerable en este sector específico.

Analizando el conjunto de ejecuciones hipotecarias registradas, se destaca que el 88,4% de las ejecuciones sobre viviendas afectó a propiedades usadas, lo que muestra un incremento anual del 7,1% y una caída trimestral del 23,6%. En contraposición, las ejecuciones sobre viviendas nuevas se han elevado un 42,4% interanual, reflejando un aumento significativo en la actividad de este segmento del mercado.

Un dato revelador es que el 12% de las ejecuciones hipotecarias iniciadas sobre viviendas en este trimestre corresponden a hipotecas constituidas en 2007, mientras que el 17,6% a hipotecas firmadas en 2006 y un 10,6% a contratos de 2005. Esto pone de manifiesto la carga histórica que estos contratos representan para muchos propietarios en la actualidad.

De acuerdo con los resultados, el periodo entre 2004 y 2008 ha concentrado el 55,3% de las ejecuciones hipotecarias iniciadas en los últimos tres meses, un dato que denota la duración y persistencia de los problemas asociados con la financiación y la propiedad en este contexto histórico.

Finalmente, en la distribución por comunidades autónomas, Cataluña lidera el número de ejecuciones sobre viviendas con un total de 588, seguida de Andalucía con 548 y la Comunidad Valenciana con 450. En el otro extremo de la tabla, se encuentran Navarra con 11 ejecuciones, La Rioja con 19 y Cantabria con 22, destacando las disparidades en el impacto de las ejecuciones hipotecarias a lo largo del territorio español.