MURCIA, 30 Sep.
El Fiscal solicita una lástima de 13 años de prisión para el sujeto acusado de matar a otro asestándole una puñalada en el lapso de una discusión que sucedió dentro de un bar de Caravaca de la Cruz en el mes de julio de 2020, según el escrito de calificación del Ministerio Público al que tuvo ingreso Europa Press.
El comienzo del juicio está pensado este lunes, a las diez.30 horas, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Murcia con la sesión para la constitución del Jurado Habitual.
En preciso, los hechos tuvieron sitio sobre las 23.00 horas del diez de julio de 2020, en el momento en que el acusado estaba en un bar de Caravaca de la Cruz y empezó a chillar y a incordiar a los clientes del servicio que, en ese instante, veían un partido de fútbol por televisión.
El solicitado del local le llamó la atención por su accionar y le solicitó que abandonara el lugar. Ante la negativa del acusado, otro hombre que asimismo estaba en el local le mencionó que se abstuviese de continuar alterando el orden y que obedeciese las advertencias del gerente.
Sin embargo, el acusado le respondió propinándole un puñetazo y, por último, el solicitado del local logró sacar al atacante a la calle, según los hechos considerados probados por el Fiscal.
A continuación, el acusado se dirigió a su hogar, cogió de la cocina un cuchillo de 22 centímetros de largo en conjunto y 12 centímetros de hoja y regresó al bar minutos después.
Paralelamente, el hombre que intercedió en la riña y había sido golpeado asimismo abandonó el lugar y estuvo paseando mientras que procuraba entrar en contacto por teléfono con la policía, sin lograrlo. Por ello, se dio media vuelta y regresó a las inmediaciones del bar.
Seguidamente, el acusado se situó en oposición al lugar de comidas blandiendo el cuchillo que terminaba de coger en su residencia y empezó a llamar al solicitado diciendo: "negro, sal".
En ese instante, el hombre que en un inicio había recibido el puñetazo tras procurar mediar en la discusión se aproximó al acusado diciéndole que se calmase.
Acto seguido, sin mediar palabra, el acusado le dió una puñalada en el cuello con el cuchillo mientras que exclamaba: "muérete". Todo ello, según el Fiscal, "con el propósito de terminar con la vida" de la víctima.
Varios clientes del servicio del lugar de comidas, que en ese instante estaban en la terraza, lograron achicar al acusado hasta la llegada de la Policía Local. Los agentes continuaron a intervenir el arma homicida que el acusado había lanzado bajo un vehículo estacionado en las cercanías.
La agresión provocó el fallecimiento inmediato de la víctima, sin que las asistencias médicas alejadas al rincón tengan la posibilidad de solucionarlo.
Según el Fiscal, el acusado no presentaba en el instante de los hechos sintomatología que redujera su aptitud para entender la ilicitud de los hechos, de este modo para accionar de conformidad con esa entendimiento. Tampoco cumplía los criterios para el diagnóstico de cuadro de dependencia de alcohol o cocaína, así como mantiene el Ministerio Público.
El atacante fue atendido en el Servicio de Urgencias del Hospital Comarcal del Noroeste, en Caravaca de la Cruz, sobre las 4.40 horas del 11 de julio. Presentaba hedor alcohólico y la analítica de orina fue efectiva a cocaína.
No obstante, los facultativos que lo atendieron comprobaron que estaba consciente, destinado y con buen estado general, no apreciándose otros signos que indicaran intoxicación por estas substancias o modificaciones psicopatológicas.
La víctima tenía 59 años, estaba divorciado y tenía tres hijos mayores de edad que no demandan indemnización por estos sucesos.
El Fiscal mantiene que el acusado es creador de un delito de homicidio por el que procede imponerle la pena de 13 años de prisión y la inhabilitación absoluta a lo largo del tiempo de la condena, tal como el pago de las costas.