En medio de un contexto de polarización política creciente, el Centro de Estudios Murciano de Opinión Pública (CEMOP), perteneciente a la Universidad de Murcia, ha llevado a cabo la IV Encuesta Nacional de Polarización Política. Según lo reportado por la institución académica, se ha incrementado en un 30% la polarización afectiva en España desde el año 2021.

El término de polarización, en la actualidad, va más allá de lo puramente político y se ha vuelto común en conversaciones cotidianas entre diferentes ámbitos sociales, según explicó el catedrático de Ciencia Política de la UMU y co-director del CEMOP, Ismael Crespo.

Este tipo de polarización, conocida como polarización afectiva, se refiere a un sentimiento de fuerte antipatía hacia los seguidores de otros partidos y un sentido de adhesión hacia los seguidores del propio partido o bloque ideológico, agregó Crespo.

La encuesta, que contó con una muestra de 1,239 casos y se llevó a cabo durante la campaña de las elecciones al Parlamento Europeo en junio pasado, reveló que los niveles de polarización afectiva siguen en aumento en España.

Entre los años 2021 y 2024, se ha registrado un incremento del 30,6% en la polarización afectiva, destacando un aumento del rechazo por parte de votantes del PSOE hacia el PP. Asimismo, un 82% de los encuestados percibe un aumento en la crispación política en comparación con hace cuatro años.

La antipatía hacia los principales líderes políticos es evidente, con un incremento notable en el rechazo hacia figuras como Yolanda Díaz y Pedro Sánchez. Por otro lado, Alberto Núñez Feijóo es el líder con menor rechazo, mientras que Santiago Abascal es quien genera la mayor antipatía, de acuerdo al termómetro de sentimientos utilizado por el CEMOP.

Uno de los temas que más polarización genera es la Ley de amnistía, con un 56% de los encuestados expresando su desaprobación. En cuanto a la Ley Trans, el 45,1% de la población la apoya, siendo las mujeres las que muestran mayor respaldo. Por otra parte, los votantes de Vox son quienes más rechazan esta medida.

En relación a la separación de poderes, se destaca una predisposición de votantes de ciertos partidos a limitar la capacidad del poder judicial para anular normas aprobadas por el parlamento, lo cual plantea un cuestionamiento a la democracia liberal.

Los resultados del estudio evidencian una tendencia a apoyar medidas que transgredan los procedimientos democráticos en situaciones de peligro, especialmente entre aquellos con mayores niveles de polarización afectiva.

Este estudio, financiado por la Fundación Séneca a través del proyecto POLARIZA, liderado por Ismael Crespo, ha puesto a disposición de la comunidad investigadora las bases de datos de forma abierta a través del sitio web del CEMOP.