El cáncer de pulmón representa un serio desafío para la salud pública, y por ello, la Consejería de Salud de Murcia subraya la importancia de adoptar hábitos saludables que, entre otros beneficios, ayuden a prevenir esta enfermedad devastadora. La inclusión de buenas prácticas como evitar el consumo de tabaco y limitar el alcohol son recomendaciones clave en este esfuerzo por reducir la incidencia del cáncer.

En el marco del Día Internacional de Lucha contra el Cáncer de Pulmón, que se observa el 17 de noviembre, el consejero de Salud, Juan José Pedreño, hizo hincapié en la gravedad de esta enfermedad. Aunque el tabaquismo sigue siendo la principal causa de este tipo de tumor, acarreando el 85% de los decesos asociados, según informes de la Organización Mundial de la Salud, es vital reconocer que existen más factores de riesgo que no deben pasarse por alto.

Entre los riesgos mencionados por el consejero se encuentran el tabaquismo pasivo, la exposición a ciertos productos químicos, problemas de salud respiratoria crónicos, y la predisposición genética al cáncer. Además, resaltó la relevancia de mantener un estilo de vida activo, una alimentación adecuada, así como la exposición controlada al sol, argumentando que adoptar estas medidas podría potencialmente reducir la mortalidad en un 30%.

Los datos de la Asociación Española Contra el Cáncer revelan que en el último año, se diagnosticaron 8.259 nuevos casos de cáncer en la Región de Murcia, de los cuales 867 correspondían a cáncer de pulmón. Este tipo de cáncer se posiciona como el tercer tumor más prevalente entre los hombres y las mujeres de la región, siendo el colorrectal el más común, seguido por próstata y mama.

Un avance significativo en el tratamiento del cáncer de pulmón se ha dado en el hospital clínico universitario Virgen de la Arrixaca, donde se ha introducido una innovadora técnica quirúrgica para abordar tumores que son difíciles de alcanzar. Este método, conocido como 'Roll' (por sus siglas en inglés), utiliza localización radioguiada para identificar y extirpar nódulos sospechosos ocultos.

Esta técnica, aunque previamente utilizada en la cirugía de cáncer de mama, mejora notablemente la atención a pacientes que presentan nódulos pulmonares de menos de un centímetro de diámetro. Proporciona una localización precisa del tumor y permite la inyección de una pequeña dosis de radiactividad en la lesión que va a ser eliminada, lo cual es crucial para un procedimiento exitoso.

Como resultado de estos avances, el tratamiento de pequeños tumores, que tradicionalmente presentan un reto considerable, se vuelve mucho más manejable. La técnica menos invasiva no solo reduce el tiempo requerido en quirófano y la duración de la estancia hospitalaria, sino que también ofrece al cirujano mayor certeza de que el nódulo ha sido completamente extirpado, lo que se traduce en una mayor seguridad para el paciente.

Finalmente, el consejero Pedreño enfatizó la firme intención del Gobierno regional, a través del Instituto de Investigación Biosanitaria Pascual Parrilla (IMIB), de invertir en la investigación orientada a cánceres con tasas de supervivencia bajas o estancadas, aquellas con una tasa de supervivencia inferior al 30% a cinco años, así como aquellos que tienen un impacto significativo en la población. Este compromiso refleja una preocupación genuina por mejorar la atención y los resultados para aquellos afectados por esta enfermedad."