Nueva iniciativa educativa beneficia a casi 40 menores en El Espíritu Santo Espinardo
En Murcia, la concejal de Bienestar Social, Familia y Salud, Pilar Torres, se acercó esta mañana al Centro Educa de Espinardo para conocer de primera mano las labores que llevan a cabo con los menores a su cargo.
Este centro tiene como objetivo brindar atención y cubrir las necesidades básicas de niños en edad temprana, abarcando diferentes capacidades como lingüísticas, cognitivas y emocionales, principalmente de niños del barrio de El Espíritu Santo.
Además, otra función clave de este proyecto es involucrarse en labores sociales con el barrio, priorizando a aquellas familias derivadas de los servicios sociales.
El Centro Educa nació hace tres décadas con la finalidad de asegurar que los menores puedan satisfacer sus necesidades básicas al asistir al centro. De esta manera, se busca facilitar la escolarización de niños pertenecientes a familias de bajos recursos y en situación de riesgo social, promoviendo la inserción social y laboral de estas familias.
"Queremos ampliar y mejorar la protección y educación integral en la primera infancia, especialmente en los niños más vulnerables y desfavorecidos. Por esta razón, desde el Ayuntamiento de Murcia seguimos comprometidos en proporcionarles el apoyo necesario para llevar a cabo esta labor crucial", expresó Pilar Torres.
Equipado con tres aulas divididas por edades, el centro brinda una atención más personalizada a un total de 39 niños y niñas con edades entre cinco meses y tres años. Muchos de ellos pertenecen a la etnia gitana y provienen de otros países.
Durante el curso escolar, se implementa un enfoque basado en rutinas, ya que en estas edades es esencial para su desarrollo; estas rutinas abarcan aspectos como la higiene, alimentación, descanso y protección.
Además, el centro lleva a cabo diversas actividades para que los niños alcancen objetivos específicos para su ciclo, trabajando de manera colaborativa en proyectos. Esta metodología se enfoca en la manipulación, observación y experimentación de recursos y materiales por parte de los niños.
Finalmente, se realizan actividades conjuntas entre las tres aulas con el propósito de que niños de diferentes edades interactúen entre sí, fomentando la participación positiva de las familias en el sistema educativo.
"Buscamos que los padres colaboren con nosotros, compartiendo ideas, informándoles sobre los objetivos que se trabajan a lo largo del curso y brindándoles pautas educativas que les ayuden en su labor parental, unificando criterios y metas", concluyó Torres.