En un significativo golpe contra el narcotráfico, la Guardia Civil ha desmantelado un punto de venta de drogas en una vivienda de San Javier, Murcia. Las fuerzas de seguridad han arrestado a tres personas, todas pertenecientes a la misma familia, cuyas edades oscilan entre los 38 y los 46 años, acusándoles de tráfico de estupefacientes.

La operación, conocida como 'Vamore', incluyó el registro de la vivienda, lo que resultó en la confiscación de varias dosis de cocaína, hachís y marihuana, junto a los utensilios necesarios para su distribución. Además, los agentes se incautaron de 2.600 euros en efectivo, según informaron fuentes oficiales de la Guardia Civil.

Los agentes fueron testigos de la actividad frenética en el inmueble, que se convirtió en un punto de encuentro para supuestos compradores, entre los cuales se encontraban incluso menores de edad, que llegaban a toda hora para adquirir diversas sustancias ilícitas.

La situación había generado una creciente inquietud en la comunidad local, pues, paralelamente, se habían incrementado los delitos contra la propiedad atribuibles a algunas de las personas que visitaban ese domicilio.

Durante un periodo de seis meses, la Guardia Civil realizó exhaustivas labores de vigilancia y recopilación de información sobre los operantes, un matrimonio y el hermano de uno de ellos, lo que permitió acumular pruebas suficientes para actuar.

Los tres individuos parecían adoptar rigurosas medidas para salvaguardar su actividad delictiva, incluyendo la tenencia de perros que alertaban sobre cualquier persona sospechosa en los alrededores de la vivienda.

Una vez recopilada la evidencia, el caso fue presentado ante la judicatura, que autorizó el registro del hogar. La intervención fue llevada a cabo con un amplio despliegue, que incluyó unidades de seguridad, recursos de investigación, un servicio cinológico y drones, facilitando el proceso con total eficacia.

En la operación se encontraron dosis de cocaína, marihuana en diferentes formas, varias tabletas de hachís y herramientas necesarias para la dosificación y venta, tales como envoltorios, utensilios de corte y una balanza de precisión. El efectivo en billetes de diferentes denominaciones también fue confiscado.

Las investigaciones revelaron que el matrimonio, a cargo de la vivienda unifamiliar, no tenía ingresos legales, alimentando la sospecha sobre el origen del dinero encontrado. La investigación permanece abierta, lo que sugiere que podrían producirse más detenciones en un futuro cercano.