La falta de lluvias continuadas llevará a una sequía prolongada en la cuenca del Segura a partir de marzo, advierte la CHS.
La consejera Rubira ha instado a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) a que tome posición sobre los recurrentes recortes que se están produciendo mes tras mes.
En una reunión celebrada en la sede de la CHS en Murcia, el presidente Mario Urrea alertó de que, si no se producen precipitaciones continuadas antes de marzo, la cuenca del Segura entrará oficialmente en una sequía prolongada. Ante esta situación, será necesario recurrir a los pozos de sequía para garantizar el suministro de agua.
Urrea también informó sobre la inversión de aproximadamente 30 millones de euros que se ha realizado este año por parte de la CHS, la Dirección General del Agua y fondos europeos. Asimismo, señaló que las restricciones en los desembalses han permitido un ahorro del 12% en la última semana.
En cuanto al estado de la cuenca, Urrea afirmó que se mantiene en situación de alerta, pero que ha habido una ligera mejoría en el Tajo-Segura debido a la mejora de los volúmenes de agua y a la incorporación de volúmenes desalados. Sin embargo, destacó que siguen siendo necesarias las restricciones.
Además, se planteó la imposición de medidas cautelares en el acuífero Ascoy-Sopalmo, que presenta el mayor índice de sobreexplotación de toda la cuenca. Esta propuesta busca complementar los recursos con aguas extraídas de otras comunidades de regantes.
Por su parte, la consejera Rubira criticó los recortes impuestos por el Ministerio y solicitó a la CHS que tome posición al respecto. También expresó su preocupación por la falta de lluvias y pidió que se preparen los pozos de sequía. Por último, reclamó más inversión en obras hidráulicas para hacer frente a la delicada situación actual.
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