Crónica Murcia.

Crónica Murcia.

Murcia inicia la primera normativa en España para salvaguardar su red de riego histórica.

Murcia inicia la primera normativa en España para salvaguardar su red de riego histórica.

El Ayuntamiento de Murcia ha dado un paso significativo en la preservación de su identidad cultural y ambiental al introducir la primera ordenanza municipal en España que protege un sistema de riego ancestral: la Huerta de Murcia. Este marco regulatorio tiene como objetivo salvaguardar tanto el paisaje como los elementos históricos de este sistema, frente a los desafíos que plantea el crecimiento urbano.

El anuncio fue realizado por el alcalde José Ballesta, quien estuvo acompañado por el concejal Antonio Navarro, durante una visita a las obras de canalización de la acequia Benetúcer. Este proyecto se destaca como un modelo de respeto hacia el medio ambiente y eficiencia en la gestión del agua, al tiempo que contribuye a restaurar la belleza natural de los canales.

La Huerta de Murcia no es solo un sistema de regadío; es una parte esencial de la identidad del municipio, repleta de valores culturales y ambientales. Este reconocimiento ha llevado al Ayuntamiento a considerar indispensable la creación de una normativa que garantice su preservación, asegurando que las tradiciones agrícolas y su convivencia con el entorno natural sigan vigentes.

La nueva ordenanza busca establecer un marco normativo que sea accesible y comprensible para los ciudadanos, definendo criterios claros para orientar las obras necesarias en los canales de riego tradicionales, así como fomentar una administración más ágil y eficiente en estos procesos.

En sus declaraciones, Ballesta subrayó la integralidad de la norma, que abarca todos los elementos relacionados con el sistema de riego, asegurando que se mantiene el respeto hacia los cauces y su entorno. Este enfoque convierte a Murcia en pionera en la protección de su patrimonio hidráulico.

La normativa introduce, por primerísima vez en el país, un sistema riguroso que dictamina que cualquier intervención en las acequias debe tener en cuenta el respeto por el paisaje y el patrimonio cultural. Esto posiciona a Murcia como un modelo a seguir en la defensa de la agricultura tradicional y sus entornos.

Entre las disposiciones más relevantes, se prohíbe la transformación de los canales en estructuras modernas como el entubado, se protege el arbolado de ribera autóctona y se fomenta la plantación de especies tradicionales, destacando su valor ecológico y paisajístico.

La norma también enfatiza la importancia de mantener y restaurar elementos patrimoniales como puentes y compuertas, asegurando que la integración paisajística en zonas urbanas y verdes sea una prioridad, anclando así la historia de cada canal en la memoria colectiva de la comunidad.

Además, se establece una colaboración con las comunidades de regantes para restaurar secciones que actualmente se encuentran entubadas, conservando su forma original. La normativa contempla la creación de refugios para la fauna en caso de interrupción del agua y establece prohibiciones sobre el uso de materiales de construcción inadecuados en los cauces.

Con respecto a la seguridad, se han definido medidas de protección en los espacios públicos que incluyen barandillas estéticamente integradas al paisaje, y cada canal será identificado con su nombre tradicional. En situaciones donde se necesiten construir pasos, se minimiza el impacto visual mediante un diseño cuidadoso.

La acequia Benetúcer ha sido la primera en beneficiarse de esta normativa. Tras un parón en su desarrollo, el proyecto revisado ha logrado restaurar el canal, utilizando técnicas y materiales tradicionales que devuelven al cauce su papel en el paisaje murciano, además de replantar 43 árboles autóctonos y preservar olmos existentes.