Crónica Murcia.

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Policía desarticula red delictiva en Murcia que explotaba a trabajadores extranjeros

Policía desarticula red delictiva en Murcia que explotaba a trabajadores extranjeros

Agentes de la Policía Nacional han desmantelado un entramado criminal en Murcia que explotaba a trabajadores de origen Bangladesh. La operación ha resultado en la detención de 14 personas, acusadas de favorecimiento a la inmigración ilegal, contra los derechos de los trabajadores, pertenencia a un grupo criminal, falsedad documental, usurpación del estado civil y defraudación del fluido eléctrico.

La investigación llevada a cabo por la Policía Nacional reveló la existencia de este entramado criminal en la Región de Murcia, donde se captaba a personas procedentes de Bangladesh para trabajar en locales de kebabs ubicados en varias localidades, como Cieza, Abarán, Molina de Segura, Jumilla y Hellín (Albacete).

Los trabajadores eran sometidos a condiciones de trabajo infrahumanas, con largas jornadas laborales durante los siete días de la semana y bajos salarios. Además, muchos de ellos vivían en cuartos cerrados y reducidos, sin luz natural ni ventilación, en los almacenes de los locales donde trabajaban.

La Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Murcia se unió a la operación en virtud de un convenio de colaboración entre el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el Ministerio del Interior, con el objetivo de luchar contra el empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social.

Los agentes de la Policía Nacional descubrieron que la mayoría de los trabajadores se encontraban en situación irregular en el país y utilizaban la documentación de otras personas con su consentimiento para hacerse pasar por ellos en caso de una posible inspección, usurpando así su identidad y cotizando jornadas laborales sin trabajar realmente.

En el transcurso de la operación, que contó con la colaboración de la Policía Local de Cieza, se descubrió que dos de los locales tenían conexiones ilegales a la red eléctrica, lo que resultó en un fraude de casi 8.500 euros.