El Museo Nacional de Arqueología Subacuática (ARQVA), que forma parte del Ministerio de Cultura y está ubicado en la histórica ciudad de Cartagena, en la región de Murcia, presenta en una exposición temporal un notable conjunto de manillas premonetales del siglo XVI. Estas piezas fueron descubiertas en el pecio conocido como 'Iturritxiki', que se encuentra en las aguas de Guetaria, en el País Vasco. Esta información ha sido confirmada por fuentes de la mencionada institución a través de un comunicado formal.
Las manillas, que pertenecen a 'Gordailua', el Centro de Colecciones Patrimoniales de Guipúzcoa, se exhiben como parte del proyecto 'Pieza invitada'. Esta iniciativa tiene como objetivo destacar y poner en valor el rico patrimonio cultural subacuático de España, ofreciendo una plataforma para la exhibición temporal de bienes culturales provenientes de diversas instituciones museísticas.
Estas argollas, fabricadas en latón, fueron transportadas a bordo de una urca fletada por comerciantes portugueses, probablemente desde Amberes, en Bélgica, el puerto más relevante de la época, con destino final en África. Las argollas eran altamente valoradas por los nativos africanos, que las utilizaban no solo como ornamentación, sino también como símbolos de estatus, en dotes matrimoniales y como ofrendas ceremoniales en diversas tradiciones.
En el golfo de Guinea, la práctica de intercambio era común, donde estos brazaletes se cambiaban por oro, marfil e incluso personas esclavizadas. Se estima que, por doce de estas manillas, era posible obtener una persona, quien luego era trasladada a América para su venta a cambio de productos como algodón, tabaco, azúcar y ron. Este proceso ilustra las dinámicas desgarradoras del comercio esclavista de la época.
Al llegar a América, estas personas eran forzadas a trabajar en condiciones deplorables, ya sea en plantaciones de arroz y café, en minas, en la construcción o como mano de obra doméstica. Así, estas manillas no solo representan un objeto de valor comercial, sino que también son un devastador recordatorio de las transacciones en las que los seres humanos eran tratados como meras mercancías.
En el pecio de 'Iturritxiki', se han recuperado más de 300 de estas manillas. Estas piezas, fabricadas mediante molde y en serie, servían como las primeras versiones de monedas en el contexto de los trueques de la época. Se transportaban en la nao mercante, embaladas en barriles de madera pequeños, de aproximadamente 40 centímetros de diámetro, conteniendo más de 100 argollas por tonelada.
En el año 1505, se documentó que el precio de una persona esclavizada variaba entre 12 a 15 de estas manillas, dependiendo de características como el pulido, el acabado, y la sonoridad de cada pieza. Este dato es revelador acerca de cómo se valoraban estos objetos en el intercambio humano.
Las manillas son relativamente comunes en los yacimientos subacuáticos de naufragios datados entre los siglos XVI y XIX, tanto en Europa como en África. Sin embargo, el pecio 'Iturritxiki' se destaca como el más antiguo en el que se han encontrado estas valiosas manillas, lo que resalta su importancia en el estudio del comercio y las interacciones humanas en esos períodos históricos.
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.