El propósito fundamental de este ambicioso proyecto es el desarrollo de avances tecnológicos de vanguardia que permitan la implementación de procedimientos efectivos de desnitrificación.

MURCIA, 20 de noviembre.

El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, en colaboración con el Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI), ha establecido una alianza estratégica con el Gobierno de la Región de Murcia mediante la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor. Juntos, están enfocados en lanzar un proyecto que busca crear una "solución innovadora y tecnológica" destinada a mitigar el impacto del agua salobre, que se encuentra saturada de nutrientes, en el Mar Menor.

Este ambicioso proyecto tiene como meta primordial abordar el problema de las aguas que provienen de la rambla del Albujón y del acuífero cuaternario, identificadas como dos de las principales fuentes de entrada de agua cargada de nutrientes que perjudican de manera considerable a este ecosistema excepcional y su estado ecológico. Esta información fue proporcionada en un comunicado por la Delegación del Gobierno y por la administración murciana.

En palabras de la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, esta decisión refleja "el compromiso del Gobierno de España por fomentar soluciones innovadoras que contribuyan a la recuperación y protección del Mar Menor". Morant subrayó que "estamos realizando una inversión sin precedentes en ciencia e innovación para hacer frente a los grandes desafíos que enfrentamos como nación, incluyendo la defensa de nuestros espacios naturales".

El consejero Juan María Vázquez, por su parte, ha enfatizado que el inicio de los trabajos de este proyecto es "un paso significativo frente a la mayor perturbación que actualmente sufre el Mar Menor", destacando la importancia de aprovechar la innovación tecnológica y la cooperación interinstitucional para ofrecer soluciones sostenibles a largo plazo.

Para poner en marcha este proyecto, el CDTI procederá a lanzar un proceso de Compra Pública Innovadora, considerado como una herramienta estratégica que permite a las administraciones públicas explorar y adquirir soluciones innovadoras que, por el momento, no están disponibles en el mercado y que requieren investiga­ción y desarrollo previo.

De este modo, se establecerán los requerimientos y necesidades a empresas tecnológicas y centros de investigación tanto nacionales como internacionales para estimular el desarrollo de tecnologías avanzadas que aborden desafíos específicos, incluyendo la desnitrificación de las aguas que desembocan en el Mar Menor, tanto en su faceta superficial como subterránea.

Como parte de este proceso, se llevará a cabo una consulta preliminar de mercado, la cual permitirá identificar y evaluar las tecnologías existentes y emergentes en el ámbito de la desnitrificación y el tratamiento de aguas con un alto contenido de nutrientes. Esto, a su vez, abriría la puerta para extender su aplicación a otros contextos en el futuro.

Dicha consulta proporcionará información vital para seleccionar la solución tecnológicamente más sólida y adecuada, con el objetivo de mejorar la calidad del agua y minimizar el impacto ambiental en el ecosistema.

Si se logran cumplir los objetivos establecidos, la tecnología que se desarrolle podría aplicarse a cualquier masa de agua afectada por nitratos, ampliando así su utilidad más allá de los acuíferos que inciden en el Mar Menor.

A través de esta modalidad de compra pública, el CDTI ha estado adquiriendo desde 2018 servicios de investigación y desarrollo para crear prototipos de productos o servicios innovadores que cumplan con necesidades públicas, en forma de series de prueba.

El prototipo que se genere en el marco de estas Compras Públicas se cederá a la entidad pública española interesada, que esté en condiciones de proporcionar el ambiente real necesario para validar la tecnología desarrollada. Es importante señalar que el prototipo deberá ser utilizado exclusivamente con fines de demostración tecnológica, orientados a validar la tecnología, sin que se contemplen objetivos comerciales posteriores. Estas iniciativas se financian, principalmente, mediante fondos europeos.