El pasado 14 de julio, en un notorio giro de los acontecimientos en Torre Pacheco, la formación política Podemos ha decidido llevar ante la Fiscalía a determinados miembros de Vox, a los que acusan de promover y alentar la difusión de videos que representan agresiones violentas. La diputada regional por Podemos, María Marín, ha sido la portavoz que ha hecho estas declaraciones.

Marín ha definido los sucesos que tuvieron lugar recientemente como una "cacería contra el inmigrante", equiparando esta situación a un "pogromo medieval". Según la información provista por Podemos, la diputada ha señalado a dos figuras clave como responsables. El primero sería, según Marín, un sector de "ultraderecha confiada en su impunidad", la cual, a su juicio, ha cruzado líneas inaceptables.

La diputada no ha escatimado en críticas hacia Vox, afirmando que varios de sus miembros han estado compartiendo y alentando videos de violencia contra jóvenes en Torre Pacheco, quienes no estaban involucrados en ningún conflicto, únicamente por su origen étnico. Esta situación, ha enfatizado, no quedará sin respuesta legal, ya que están trabajando para identificar a esos integrantes de Vox con la intención de presentar una denuncia formal ante las autoridades competentes.

Asimismo, Marín ha responsabilizado en parte al Partido Popular, liderado por López Miras, indicando que la actual situación proviene de una confluencia de políticas racistas aceptadas por el gobierno regional. Esto se hace evidente para ella en la negociación de presupuestos que exige el cierre de un centro para menores, resaltando que este tipo de acuerdos alimentan un clima de hostilidad.

En una crítica adicional, la diputada ha culpado a la Delegación del Gobierno de ser inactiva. Desde su perspectiva, el viernes, la policía local no fue suficiente, y la escasa presencia de guardias civiles el fin de semana dejó a los ciudadanos de Torre Pacheco desprotegidos. Marín ha comparado este despliegue con la respuesta contundente que se vio recientemente en Cartagena contra los trabajadores del metal.

Marín no ha dudado en calificar la inacción de la Delegación como un abandono hacia los residentes de Torre Pacheco, sean estos de origen extranjero o locales, quienes se vieron obligados a refugiarse en sus hogares durante lo que ella considera un fin de semana aterrador. En consecuencia, ha solicitado la renuncia inmediata de la delegada, Guevara.

La diputada también ha hecho un llamado a la unidad, subrayando que en la Región de Murcia son más las personas que abogan por una convivencia pacífica. Han reivindicado una sociedad que, según ella, es mayoritariamente compuesta de individuos trabajadores y respetuosos, y ha instado a la comunidad a organizarse para resistir contra la violencia y el odio.

Finalmente, Marín ha anunciado que están preparando una gran movilización social para rechazar la barbarie, enfatizando que la unidad es la clave para contrarrestar a los violentos. La diputada cierra su mensaje con un fuerte llamado a la acción, animando a la sociedad murciana a levantarse y defender los valores de convivencia y paz que la caracterizan.