Crónica Murcia.

Crónica Murcia.

Cuatro ganaderos bajo investigación por verter desechos de 13,500 animales en ramblas.

Cuatro ganaderos bajo investigación por verter desechos de 13,500 animales en ramblas.

La situación en Murcia ha generado serias preocupaciones sobre la protección medioambiental, después de que la Guardia Civil iniciara una investigación que involucra a cuatro ganaderos. Estos individuos son sospechosos de haber construido balsas de recogida de purines sin las adecuadas medidas de impermeabilización, lo que ha permitido el vertido directo de desechos de más de 13,000 animales a las ramblas locales.

La operación, conocida como 'Poga', fue puesta en marcha debido a la detección de irregularidades en varias granjas del municipio. La investigación ha llevado a que se tomen medidas legales contra los responsables, quienes podrían enfrentar cargos por delitos relacionados con los recursos naturales y el medio ambiente.

Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) iniciaron la investigación hace varios meses, colaborando con expertos de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para identificar los lugares donde se sospechaba que se estaban cometiendo estas infracciones. A través de una serie de inspecciones, se constató que hasta diez balsas estaban siendo operadas de manera irresponsable, sin seguir las normativas de servidumbre y sin la necesaria impermeabilización.

Estas balsas, ubicadas en áreas críticas, estaban vertiendo líquidos contaminantes directamente en las ramblas de Carmen y Cuesta Alta. La magnitud del problema es alarmante, considerando que se trataba de una explotación ganadera que alberga un número tan elevado de cerdos.

Como consecuencia de la investigación, el Seprona ha avanzado con diligencias legales en contra de los responsables tras recibir el informe pertinente de la comunidad, que detalla el daño causado a la reserva natural circundante. La preocupación se agudiza ante el riesgo de que, debido a la falta de impermeabilización, los lixiviados provenientes de estas balsas puedan filtrarse hacia el subsuelo de manera excesiva.

Este problema se exacerba con la posibilidad de fenómenos meteorológicos como las 'danas', que son típicos de la región y provocan lluvias torrenciales. Las precipitaciones masivas no solo facilitan la filtración de contaminantes, sino que también aceleran la llegada de estos al acuífero local, aumentando el riesgo de contaminación en las aguas subterráneas.