En un suceso que ha conmocionado a la comunidad de Cieza, la Guardia Civil ha arrestado a un hombre oriundo de Cartagena, acusado de robar una caja con joyas que, según se estima, tiene un valor de 3.000 euros. El individuo, en un aparente acto de traición, aprovechó su trabajo de reparador de cámaras de videovigilancia en un comercio local para llevar a cabo su fechoría.

La alerta se activó cuando el propietario del establecimiento informó a las autoridades sobre la desaparición de una de las dos cajas que contenían valiosas joyas, ocultas en el falso techo del local. Este informe fue recibido y documentado por los agentes del Instituto Armado, quienes comenzaron a investigar el caso inmediatamente.

El hurto se descubrió cuando un operario que estaba arreglando una de las cámaras de seguridad se topó con una de las cajas y decidió entregársela al dueño. No obstante, la otra caja había desaparecido, lo que encendió las alarmas sobre un posible robo interno.

Los investigadores se pusieron manos a la obra, revisando las grabaciones de las cámaras de videovigilancia que estaban activas en el establecimiento el día del incidente. Su labor dio frutos cuando lograron identificar al operario que, invisibilizado por la dinámica del trabajo, subió una escalera, manipuló el falso techo y sustrajo la caja, que aparentemente escondió en su caja de herramientas para no despertar sospechas al abandonar el lugar.

Finalmente, tras la recopilación de pruebas y el análisis de los vídeos, se llevó a cabo la detención del sospechoso, quien enfrenta cargos por un delito de hurto. Como resultado de esta operación, todas las joyas robadas, incluyendo pulseras, gargantillas y pendientes de oro y piedras preciosas, han sido recuperadas, brindando un cierre positivo a esta situación para el afectado.