Los esfuerzos de la Guardia Civil han dado frutos significativos en el municipio de San Javier, donde investigadores de la Benemérita han logrado aclarar hasta la fecha un total de 34 delitos que afectan al patrimonio de los ciudadanos. Este notable avance se enmarca en la operación conocida como 'Milcars', diseñada específicamente para abordar el preocupante aumento de robos en vehículos que se estaba registrando en la zona.
La operación 'Milcars' ha permitido desmantelar un grupo criminal que supuestamente estaba detrás de múltiples delitos, incluyendo robos con fuerza en vehículos, en viviendas, así como hurtos y receptación. La investigación se activó ante el alarmante incremento de delitos en el municipio de San Javier y Santiago de la Ribera, lo que había suscitado una creciente preocupación entre los habitantes de la localidad.
Desde el inicio de la operación, los efectivos del Área de Investigación de San Javier han llevado a cabo un arduo trabajo, realizando exhaustivas inspecciones en las áreas donde se cometían los robos y recopilando toda clase de evidencias que pudieran arrojar luz sobre cómo operaban los delincuentes. Este análisis detallado es parte fundamental de las estrategias implementadas para rastrear las actividades ilícitas de este grupo delictivo.
Los investigadores descubrieron que los robos eran perpetrados durante la noche, usando la oscuridad y la baja actividad de transeúntes como su mejor aliado. Previo a cada delito, los integrantes del grupo criminal realizaban un exhaustivo reconocimiento de la zona, buscando minimizar el riesgo de ser identificados o sorprendidos en el acto por testigos.
La metodología seguida por los delincuentes era clara: seleccionaban vehículos que aparentaban tener objetos de valor fácilmente comercializables a la vista. Con una eficacia inquietante, rompían las ventanillas para acceder rápidamente al interior, apoderándose de los efectos personales que encontraban y huyendo en cuestión de segundos.
En otras ocasiones, los delincuentes cambiaban su escenario de acción, trasladándose a garajes comunitarios donde permanecían ocultos hasta altas horas de la madrugada. Ya en ese momento, aprovechaban la falta de luz y la tranquilidad del entorno para fracturar los cristales de los vehículos y llevarse los objetos que encontraban dentro.
La intensa investigación ha permitido a la Guardia Civil identificar a cerca de once individuos que, presuntamente, forman parte de esta organización delictiva. En distintas etapas de la operación, se ha logrado detener a estos sospechosos, todos acusados de robos con fuerza en vehículos, en viviendas, así como de hurtos y actos de receptación.
Los resultados de esta operación son notables, ya que los agentes han conseguido recuperar una parte considerable de los bienes sustraídos, que incluyen bicicletas, videoconsolas, prendas de vestir, calzado y herramientas, todos los cuales han sido devueltos a sus legítimos propietarios. Esta acción no solo demuestra la efectividad de las fuerzas de seguridad frente al delito, sino que también envía un mensaje claro a los criminales sobre la vigilancia constante que se mantiene en la región.
Además de los robos en vehículos, las investigaciones han permitido esclarecer al menos dos robos con fuerza en viviendas, evidenciando así la amplitud de actividades delictivas en las que estaba involucrado este grupo. Aprovechando la oscuridad de la noche, los delincuentes llevaban a cabo sus fechorías, fracturando lunas tanto en la vía pública como en los garajes comunitarios, lo que ha llevado a un aumento de la preocupación ciudadana en el área.
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