El descubrimiento de once granadas de mano modelo 31 utilizadas durante la Guerra Civil Española en la cala El Molí de Sant Feliu de Guixols ha sido posible gracias a la intervención del Equipo de Desactivación de Explosivos (EDE) de la Unidad de Buceadores de Medidas Contraminas (UBMCM) de la Armada, con base en Cartagena (Murcia).

La colaboración ciudadana alertó a la Guardia Civil sobre la presencia de posibles artefactos explosivos sumergidos en la cala El Molí de Sant Feliu de Guixols. Tras la confirmación de que se trataba de granadas de mano, la Armada desplegó un equipo de desactivadores de explosivos de la UBMCM para llevar a cabo la intervención necesaria.

El Cuartel General de la Fuerza de Acción Marítima coordinó la operación, que contó con la participación de diversas entidades como el Ayuntamiento de Sant Feliu de Guixols, el servicio de emergencias del 112, Protección Civil, Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil con patrulla en tierra y dos embarcaciones.

La Armada ha destacado la importancia de la Unidad de Buceadores de Medidas Contraminas (UBMCM) y su papel crucial en la desactivación de artefactos explosivos submarinos, subrayando que estas actividades son competencia exclusiva de la Armada debido a su especialización en este tipo de tareas.