
El pasado 11 de septiembre, el Consejo de Gobierno de la Región de Murcia aprobó un importante acuerdo que marca un paso significativo en el ámbito de la educación y la salud mental. Este convenio establece una colaboración entre la Consejería de Educación y Formación Profesional y la Federación de Salud Mental de la región, con el fin de implementar un programa educativo centrado en la sensibilización, así como en la prevención y apoyo especializado para aquellos estudiantes que enfrentan o están en riesgo de enfrentar problemas de salud mental.
El acuerdo estipula que la Federación de Salud Mental y sus asociaciones colaboradoras se encargarán de ofrecer servicios de apoyo a las familias, realizar campañas de concienciación y establecer programas de prevención en salud mental. Asimismo, se brindará atención específica a los alumnos, reforzando la intervención temprana y el acompañamiento tanto en los entornos escolares como familiares.
Esta acción se inserta dentro del Plan Regional de Bienestar Emocional, que también busca prevenir el acoso escolar y promover la salud mental en el ámbito educativo, una iniciativa impulsada por la Comunidad Autónoma de Murcia.
Durante el actual año escolar, se prevé que este programa opere en 15 centros de Educación Secundaria, llevando a cabo entre 12 y 28 sesiones por centro, según las necesidades específicas que se identifiquen.
El principal objetivo de este programa es equipar a los alumnos con estrategias para regular sus emociones, con la esperanza de mejorar su salud mental y reducir las secuelas derivadas del estigma social que a menudo sufren.
El convenio se dirige a estudiantes diagnosticados con problemas de salud mental, así como a aquellos que muestran síntomas que afectan su bienestar personal, social o escolar, además de incluir a quienes tienen dificultades significativas para adaptarse a la dinámica educativa regular.
Las actividades se llevarán a cabo preferentemente en las instalaciones de las asociaciones durante horarios extraescolares. La participación de los alumnos se realizará siempre con el consentimiento de sus familias y de los centros educativos respectivos.
Este programa complementará los planes de trabajo individualizados de los estudiantes y estará coordinado con los servicios de orientación educativa de cada institución, asegurando un enfoque integral en la atención de las necesidades de los alumnos.
El convenio tiene una duración inicial de cuatro años, con la posibilidad de ser prorrogado por un periodo adicional de cuatro años, reiterando el compromiso de la administración con el bienestar emocional de los jóvenes murcianos.
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.