Crónica Murcia.

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Regantes y agricultores defienden el trasvase como pilar esencial para el futuro del Levante.

Regantes y agricultores defienden el trasvase como pilar esencial para el futuro del Levante.

El gobierno autonómico, junto al Sindicato de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats) y diversos representantes del sector agrario, han reafirmado la importancia del trasvase Tajo-Segura, considerándolo una infraestructura esencial para el progreso económico, la sostenibilidad ambiental y la modernización de la agricultura en la región del Levante español.

Más de 40 años después de su inauguración, esta obra sigue siendo clave para proporcionar agua a 80 municipios, beneficiando a una población de aproximadamente 2,4 millones de personas, cifra que se incrementa a 3,1 millones en los meses de verano. Además, permite el riego de más de 140,000 hectáreas agrícolas en Murcia, el sur de Alicante y Almería.

La consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, ha destacado que el trasvase no solo es crucial para la agroindustria, sino que también actúa como un pilar para el mantenimiento de las áreas rurales, la creación de empleo y la estabilización de la población en uno de los territorios más áridos de Europa.

Rubira afirmó que alrededor del 70% del agua que fluye a través del acueducto se utiliza para regadíos eficientes y tecnificados, posicionando al sureste de España como un modelo en el uso responsable del agua. En este sentido, el trasvase se considera fundamental para la cohesión territorial en un país donde la distribución del agua es extremadamente desiguala.

La consejera también subrayó que el trasvase ayuda a corregir desequilibrios hídricos históricos, creando oportunidades de desarrollo en áreas con déficit hídricos y promoviendo una distribución más equitativa de un recurso natural que pertenece a todos los españoles.

El Gobierno de la Región ha defendido de manera constante el trasvase como una herramienta de integración territorial y equilibrio en el suministro hídrico.

Rubira enfatizó que la región debe su crecimiento y desarrollo agrícola a la llegada del agua del Tajo hace 46 años, lo que permitió que en 2024 se exportaran frutas y verduras por un valor superior a 3,500 millones de euros, convirtiendo este sector en uno de los motores económicos locales.

Para seguir apoyando esta evolución, el Ejecutivo autonómico ha implementado diversas medidas e inversiones enfocadas en mejorar la eficiencia en el uso del agua en los cultivos.

José Sandoval, director general del Agua, aseguró que la región seguirá invirtiendo para equilibrar la actividad agrícola con la sostenibilidad a través de un enfoque en la eficiencia y la reutilización de recursos hídricos.

La Comunidad ha puesto en marcha planes de modernización de regadíos que superan los 600 millones de euros, reiterando su compromiso con la digitalización y la optimización de las redes de riego para minimizar pérdidas.

Actualmente, más del 85% del riego en la región se lleva a cabo con sistemas de alta eficiencia, como el riego por goteo y los sistemas automatizados, según lo indicado por Francisco Cabezas, director de la Fundación Instituto Euromediterráneo del Agua.

Murcia se alza como líder en el tratamiento y reutilización de aguas, con más del 98% del agua depurada, un dato que se aleja significativamente de la media europea. Esto ha posicionado a la región como un caso de éxito reconocido internacionalmente.

El gerente de la Entidad de Saneamiento de Murcia (ESAMUR), Joaquín Buendía, mencionó que, gracias a la dedicación del Gobierno regional hacia la regeneración de aguas urbanas, se dispone anualmente de alrededor de 120 hectómetros cúbicos para su reutilización en regadíos.

Organizaciones como Scrats han jugado un papel vital en la gestión eficiente del agua. El Gobierno regional ha destacado la ingeniosa adaptación del tejido social y del sector productivo al incorporar tecnologías avanzadas y nuevos cultivos con alto valor añadido.

La administración regional reitera que el Tajo-Segura no es motivo de confrontación, sino una solución necesaria. La consejera Rubira ha enfatizado la necesidad de reconocer la efectividad y el valor social de esta infraestructura, pidiendo solidaridad en lugar de privilegios.

Para el Gobierno murciano, asegurar el futuro del trasvase es garantizar la seguridad alimentaria de millones de europeos y el equilibrio territorial en España.

Rubira subrayó que, en un país con recursos hídricos desiguales, sistemas como el Tajo-Segura son fundamentales para promover la cohesión territorial y el acceso equitativo al agua, y su defensa debe ser entendida como un compromiso nacional por la justicia hídrica.

La Región de Murcia también está comprometida con la sostenibilidad hídrica, participando en proyectos de investigación europeos sobre reutilización y economía circular del agua, lo que refuerza su rol como referente en innovación hídrica.

El trasvase Tajo-Segura, en las regiones de Alicante, Almería y Murcia, actualmente genera más de 106,500 empleos directos y más de 300,000 indirectos. La Comunidad advirtió que una pérdida del 50% en los caudales implicaría pérdidas económicas superiores a 130 millones de euros.

El presidente del Scrats, Lucas Jiménez, ha resaltado la importancia del agua del Tajo-Segura para el regadío, dada su calidad y costo, enfatizando que para casi 3 millones de habitantes en el Levante, el agua trasvasada es una necesidad vital.

Jiménez calificó como un “despropósito intolerable” renunciar a una infraestructura que ha sido amortizada a lo largo de los años, sobre todo si no se ofrecen alternativas viables, y alertó sobre la amenaza que enfrentan los recursos hídricos subterráneos en la cuenca del Segura, advirtiendo que podría ser difícil sobrevivir sin el trasvase y el abastecimiento subterráneo.

El presidente de COAG Murcia, José Miguel Marín, subrayó que prescindir de esta infraestructura sería un “caos”. Recalcó que el trasvase es esencial para el sistema de regadíos y el abastecimiento, especialmente en el campo de Cartagena, donde la dependencia es total.

Alfonso Gálvez Caravaca, secretario general de Asaja Murcia, criticó la falta de alternativas y el “auténtico disparate” que supondría cambiar las reglas de explotación, acusando a los responsables de actuar por motivos ideológicos y remarcando los impactos negativos de planes sin planificación adecuada.