En un claro manifiesto de defensa de los derechos hidráulicos de la región, el presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, Fernando López Miras, se posicionó firmemente este lunes contra la reciente decisión del Tribunal Supremo que desestimó el recurso del Gobierno regional respecto al aumento de caudales ecológicos del río Tajo. De acuerdo con López Miras, la medida adoptada por el Gobierno central, que implica un recorte del 50% en el trasvase Tajo-Segura hacia el Levante a partir de 2027, es considerada "injusta, dañina e incluso inmoral".

Durante un acto celebrado en San Javier, el presidente murciano subrayó que, sin importar lo que haya dictaminado el Tribunal Supremo, lo cierto es que la decisión del Ejecutivo nacional sigue siendo muy perjudicial para el futuro de Murcia. "Lo único que ha indicado el Tribunal Supremo es que el Gobierno de España tenía la autoridad para adoptar esa decisión", expresó López Miras, insistiendo en la gravedad de las repercusiones que esto acarreará para la región.

El líder regional destacó la importancia crucial del trasvase Tajo-Segura, definiéndolo como una infraestructura esencial y fundamental para la supervivencia de Murcia. López Miras manifestó su compromiso de continuar defendiendo esta causa utilizando todas las herramientas disponibles, ya sean legales, políticas o sociales. "Vamos a recurrir a todas las instancias judiciales que sean necesarias para salvaguardar nuestros intereses", afirmó con determinación.

Más allá de la mera política o de la defensa de un sector crucial como el agrícola, López Miras enfatizó que el destino de la Región de Murcia está en juego. "Defender el trasvase no es simplemente una cuestión política; es la lucha por la vida de nuestra región. Cuando se trata de sobrevivir, estamos dispuestos a utilizar todos los medios para garantizar que nuestro hogar continúe prosperando, con el agua del trasvase Tajo-Segura como su arteria vital", concluyó el presidente, dejando claro su firme posición en el asunto.