En Murcia, a fecha 17 de octubre, la Mancomunidad de los Canales del Taibilla (MCT) ha intensificado sus esfuerzos en la limpieza y desinfección del canal de abastecimiento, que sufrió daños significativos a causa de la DANA. Después de haber superado las etapas más críticas de la emergencia, han comenzado a reintroducir agua potable en las redes de San Javier, San Pedro del Pinatar y Los Alcázares.

Una vez que se ha atendido el tramo más perjudicado por infiltraciones de barro, la MCT ha desplegado equipos para continuar los trabajos en otros segmentos del canal, específicamente en las tomas de Los Sáez de Tarquinales, Avileses, San Cayetano y Camachos. A pesar de las dificultades inherentes a estas tareas, se espera que el esfuerzo del personal y la tecnología utilizada permita avanzar significativamente hacia una normalización del servicio de agua.

Los trabajos no se detendrán durante el fin de semana, con operativos que funcionarán las 24 horas, lo que refuerza el compromiso de la MCT por restablecer cuanto antes el suministro de agua potable, que había sido interrumpido por el temporal. Al igual que en el sistema de El Mirador, la limpieza de estos nuevos tramos permitirá iniciar la distribución de agua tratada, facilitando la posterior certificación de la calidad del agua por parte de las autoridades sanitarias.

En un esfuerzo complementario para gestionar la crisis actual, la MCT ha solicitado la autorización necesaria para establecer un suministro de agua de emergencia no potable para la pedanía de El Jimenado, que ha estado sin acceso al agua debido al estado de su tramo del canal. Esta medida busca aliviar las necesidades de la población en cuanto a suministro para usos no potables como el llenado de cisternas.

Una vez obtenidas las autorizaciones pertinentes, el municipio asumirá la responsabilidad de conectar la red de la desaladora de Escombreras con su sistema local. Mientras tanto, la MCT también prosigue con su labor para restaurar la normalidad en el abastecimiento de agua en las localidades antes mencionadas, donde se está ya distribuyendo agua limpia para facilitar a los servicios municipales renovar sus conducciones.

Este avance es clave para que las autoridades sanitarias puedan finalmente certificar el agua de consumo doméstico como apta para la ciudadanía. En esta línea, la MCT ha comenzado a recoger muestras de agua en el canal ya intervenido que se dirige a El Mirador, realizando un análisis químico que será enviado a las autoridades para su evaluación.

La Mancomunidad mantiene un proceso de coordinación continua con los representantes municipales de las localidades afectadas, asegurando una comunicación efectiva sobre el progreso de los trabajos y atendiendo a sus necesidades, todo con el objetivo de restaurar la normalidad en el menor tiempo posible.